Hay que tener en cuenta que la
noción de éxito es subjetiva y relativa. A menudo asociado con la
victoria y la obtención de grandes méritos, el éxito es parte de
nuestra vida casi cotidiana y en general no se comparte con mucha gente. En lo
que hace a la subjetividad,
podemos decir que cada vez que nos proponemos algo y lo conseguimos, sea
mejorar nuestras condiciones laborales, aprobar un examen, dejar de fumar o
simplemente ahorrar dinero para darnos un gusto, somos exitosos. Para entender
lo relativo del concepto, tomemos un caso como ejemplo: el éxito en una competencia automovilística suele
ser terminar en el primer lugar. Sin embargo, si un piloto largó desde el
último puesto y llegó segundo, también puede considerar su participación como
un éxito. Lo mismo con aquel que, con un presupuesto mucho menor que el de sus
competidores, terminó en los primeros puestos, aunque no haya triunfado.
Sin embargo, la sociedad suele establecer una relación entre éxito, riqueza material y fama.
Esta visión distorsionada y pobre de la realidad, afecta a muchísimas personas,
generando un esquema simplificado de la vida que separa a exitosos de
fracasados. Y es justamente esta última palabra la que, al ser tomada como
contrapartida de la primera, genera aún más confusión. El éxito no debería ser
entendido como algo unidimensional, sino como la consecución de un objetivo, sea pequeño y de
carácter íntimo o grande y con gran repercusión.
Cabe destacar que la psicología habla del miedo al éxito cuando alguien que está cerca de alcanzar alguna meta personal desarrolla una acción, ya sea inconsciente o consciente, para no prosperar. Las causas de esta particularidad se encuentran en la posible vinculación mental del éxito con consecuencias negativas, como un incremento de la responsabilidad o un alejamiento de los seres queridos. Pero el estudio de este fenómeno ha ido más allá de las razones evidentes. Resulta que los seres humanos no siempre ansiamos lo mejor para nosotros; por el contrario, pocas veces nuestros deseos nos mueven hacia resultados satisfactorios y beneficiosos. El primer culpable que viene a la mente, como siempre, es los medios de comunicación con sus retorcidos y engañosos mensajes. Pero según muchos psicólogos, el miedo al éxito radica en que el individuo no se ha detenido a considerar si ha elegido el camino que realmente quiere, probablemente inducido por presiones familiares y sociales. Entonces, desde joven se ha dirigido hacia ese objetivo que, a medida que se avecina, despierta en nuestro cerebro sensaciones que nos incomodan, nos angustian, nos impiden continuar con la determinación que mostrábamos hasta entonces; y es que nuestra mente conoce la verdad, y ésta busca un escape para alertarnos de nuestro error.
Publicado por: Yudi Andrea Hincapié.
Fuente: Definición de éxito - Qué es, Significado y Concepto http://definicion.de/exito/#ixzz40AlnShZ3
https://www.google.com.co/search?q=el+exito&biw=1366&bih=623&tbm=isch&tbo=u&source=univ&sa=X&ved=0ahUKEwj93snK_vfKAhWDth4KHcHEBg0QsAQIQw#imgrc=0ZixmE96Q71txM%3A
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